Tras más de dos años del inicio de la pandemia en el mundo, comienzan a descender los casos de contagio del virus por la aplicación de las vacunas que han logrado que millones de personas ya estén inmunizadas y que sea posible la recuperación de la la epidemia.
La gran mayoría e los países europeos han empezado a levantar las medidas sanitarias y la utilización de cubrebocas en exteriores. Con la mayoría de la población inmunizada, Europa comienza también a dejar de utilizar el cubrebocas en lugares cerrados, y se empieza a adaptar a vivir con el coronavirus.
Estados Unidos también ha evolucionado en ese sentido, las principales capitales de la Unión Americana como Nueva York o Washington han decidido levantar las medidas sanitarias y permitir que las escuelas utilicen el cubrebocas si así lo consideran necesario.
Mientras que en nuestro país, 31 estados de ls República Mexicana ya están en semáforo epidemiológico verde con un alto porcentaje de la población vacunada y una importante disminución de hospitalizaciones y muertes. Por lo que en poco tiempo será posible levantar las medidas sanitarias y volver a la normalidad sin tener que utilizar el cubrebocas.
La adaptación a vivir con el coronavirus es parte del proceso que se está viviendo actualmente en el mundo. El covid-19 se compara con una gripe y se está convirtiendo en una enfermedad endémica con la que la población tendrá que convivir, sin que sea un riesgo mortal.
Al inicio de la pandemia la mortalidad de las personas era 10 veces más que hoy, desde entonces los tratamientos y las vacunas han avanzado para proteger a la población y garantizar la salud de la ciudadanía.
Las vacunas han sido muy efectivas, en un año de campañas de vacunación el más del 80% de la población mundial ya ha recibido alguna de las dosis de la vacuna y continúan inmunizando a todos los ciudadanos.
A partir de ahora, se comienza a hablar de la vida poscovid, con la reducción de muertes por la pandemia, es posible considerar que estamos en el proceso de tránsito rumbo a la estabilización de la salud a nivel mundial.
Aunque todavía permanecen las medidas sanitarias en distintos países, la Organización Mundial de la Salud ha reconocido la efectividad de las vacunas y los medicamentos que se han implementado a lo largo del segundo año de la epidemia y considera que hay 8 claves que podrían reducir la enfermedad en el futuro. Actualmente:
- Estar al aire libre es seguro.
- Las vacunas son cruciales para garantizar la salud.
- Hemos aprendido a cuidarnos y prevenir la enfermedad.
- La mayoría de los países llevan a cabo planes para evitar hospitalizaciones y muertes.
- La adaptación a vivir con el virus es una realidad.
- Los sistemas de salud han mejorado frente a el virus.
- Continúan las investigaciones para avanzar en el desarrollo de buenas prácticas de salud y nuevos medicamentos.
- La posibilidad de infectarse y morir por contagio disminuye lo que ha generado mayor capacidad de convivencia y resiliencia en la población.
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