El Museo Nacional de Bellas Artes invita a todos los amantes del arte a disfrutar de la exposición “Leonardo da Vinci y la idea de belleza” en el Palacio de las Bellas Artes que estará abierta al público del 26 de junio al 23 de agosto, junto con la obra de Miguel Angel Buonarroti que se extiende hasta el 27 de septiembre.
Debido al enorme éxito obtenido a lo largo de los primeros días de apertura el Palacio ha ampliado su horario para acceder a las visitas, ahora podrán visitar las exposiciones los martes desde las 8 de la mañana hasta las 19 hrs. y los miércoles y jueves desde las 8 de la mañana hasta las 21 hrs.
Entre las obras de Leonardo Da Vinci que se encuentran en la exposición destaca “El códice del vuelo de las aves”, uno de loas más importantes documentos que se hayan escrito sobre la aviación en el mundo. Incluso ha sido tan trascendente que cuando la NASA envió su primera misión del espacio a Marte, llevaba el chip de este libro, como símbolo de la importancia que tiene esta obra entre los investigadores y científicos del mundo.
Obras del reconocido anatomista, arquitecto, escritor, filósofo, científico, músico, poeta y urbanista Leonardo Da Vinci deleita a los mexicanos con parte de su obra. El autor de una de las máximas obras pictóricas del mundo: “La Gioconda”, también conocida como “La Mona Lisa” obra del pintor renacentista del siglo XVI conocido como uno de los máximos exponentes del Renacimiento italiano.
“La Gioconda” la pintura más famosa de Leonardo Da Vinci, se expone en el Museo de Louvre en París, Francia.
La exposición en colaboración con la Biblioteca Real de Turin presentan la muestra de “Leonardo Da Vinci y la idea de belleza”, proyecto que permite contemplar por primera vez en México el “Códice sobre el vuelo de las aves”, en conjunto con una selección de los dibujos que exploran la relación que existía entre la belleza y naturaleza según Da Vinci.
A diferencia de Miguel Angel Buonarroti quien consideraba al cuerpo humano como la máxima expresión de la armonía, Leonardo tenía la idea de que las formas de la naturaleza, incluidas las especies animales contenían la proporción exacta de la belleza.
Para Da Vinci la contemplación de las formas animales expresa un particular manera de buscar los componentes de la belleza, fueran estos registrados en rostros humanos, femeninos, masculinos, jóvenes, adultos o en las formas anatómicas de equinos, insectos o aves, que habrían de convertirse en la base del programa estético del autor.
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